César Urbano Taylor: Caracas es una mina de oro inmobiliaria
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| César Urbano Taylor: en Venezuela, la inflación motiva a las empresas a invertir en inmuebles. |
En Venezuela, la inflación puede motivar a las empresas a invertir en inmuebles, ¿cómo es posible? Porque los inmuebles son percibidos como "cuentas de ahorro en bloques y cemento".
Los motivos son los siguientes:
- La inflación.
- La devaluación de la moneda local.
- El fuerte control cambiario que mantiene el gobierno venezolano como parte de su política monetaria.
"Son cuentas de ahorro en ladrillo", relata el arquitecto Frank Alcock acerca de las torres de oficinas, el hotel con 200 habitaciones y el pequeño centro comercial y cultural que integran el proyecto "Recreo La Castellana".
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| César Urbano Taylor: dos trasnacionales adquirieron las torres del Recreo La Castellana. |
Un banco compró una de las torres y una multinacional de la alimentación, la otra. El cemento no sólo no se devalúa diariamente, sino que –gracias a la particularidad de la economía venezolana- incluso puede aumentar su valor de mercado.
Algunas transnacionales, las que tienen músculo como para sortean la crisis, no pueden repatriar sus dividendos en moneda extranjera, y al ver cómo sus bolívares se deprecian buscan invertir en bienes que adquieran valor.
"A resguardar la inversión"
"Los compradores buscan proteger su dinero en bienes raíces, oficinas y departamentos, y no perder con las devaluaciones de la moneda", sostiene Francisco Mendoza, director de comercialización de la filial de Venezuela de CBRE, inmobiliaria de Estados Unidos.
La publicidad del proyecto "Recreo La Castellana" no puede ser más clara: "Compre en bolívares y proteja su inversión". Hoy en día, es un buen momento para invertir en una "Mina de Oro" en Caracas o en cualquier zona "premium", donde el metro cuadrado es más costoso.
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| César Urbano Taylor: el "Recreo La Castellana" es una mina de oro en construcción. |
"En este último año y medio el mercado ha cambiado. Nadie se escapa a la situación ", explica Mendoza, el experto inmobiliario. “La consecuencia es que el precio del metro cuadrado bajó de US $7.000 a US$ 2.500 motivado a una sobreoferta de oficinas” argumentó.
Ahora comprar es más barato. Solo se necesitan bolívares y la confianza plena en que todo va a mejorar. Si este escenario ocurre, el beneficio de venta futuro puede ser tan grande que el propietario se frotará las manos al momento que se percate de ello.
Por: César Urbano Taylor
