César Urbano Taylor: El nexo entre la inmobiliaria y el coaching (I)
Cuando inicias un proceso de coaching inmobiliario vas a reforzar habilidades y capacidades de tu propia personalidad para hacer más efectivo tu negocio. Los resultados del coaching inmobiliario ameritan esfuerzo, pero pueden mejorar sustancialmente tu forma de trabajo.
Un coach inmobiliario utiliza sus herramientas para poder tomar la iniciativa (en otras palabras, la proactividad) y salir airoso ante la adversidad. Esa motivación debe estar en el día a día y, en buena parte, dentro de los resultados esperados.
Con un coach inmobiliario tendrás que adquirir conocimientos básicos en el tema de los bienes raíces, pero no es el target principal para este tipo de asesoría. Los resultados de coaching inmobiliario, estarán abocados a facetas que inciden directamente en tu desempeño laboral o empresarial. Para ello deberás contar con lo siguiente:
1. Planificación
El agente inmobiliario hoy en día es un asesor que otorga un abanico de servicios a sus clientes. Es mucho más que un simple vendedor. Para poder ofrecer semejantes prestaciones tiene que ser muy planificado. Al contar con la asesoría de un coach, deberás tener trazada una serie de objetivos y un plan de acción para alcanzarlos. Para ello, es esencial realizar una planificación cotidiana.
2. Orientación al logro
Evita creer en quien que te venda soluciones para “limpiar tus energías”. Cuando trabajas con un profesional, te colocarás metas que harán que pongas todo tu esfuerzo.
Aunque bien se sabe que un agente inmobiliario es más que un vendedor de inmuebles, se crea un adecuado plan de trabajo que tenga claro todo aquello que debe superar, tanto debilidades como amenazas que puedan frustrar ese negocio exitoso por el que has estado trabajando arduamente.
3. Determinación ante la adversidad
En la vida hay dos maneras de reaccionar ante ellos: o te dejas hundir, o usas el obstáculo para impulsarte hacia adelante.